3 formas de mantener saludables las sonrisas maduras

Con la edad llega la sabiduría y más responsabilidades. ¡El cuidar su sonrisa no es la excepción! A medida que envejece, su salud bucal se pone en riesgo y necesita cambiar. El mantener su boca saludable y recibir cuidado de rutina no solamente proteje sus dientes y encías, si no que también tiene un impacto en su bienestar general. 

1. Disminuya su riesgo de caries dental.

De acuerdo al Instituto Nacional de Investigaciones Dentales y Craneofaciales, casi todos los pacientes mayores de 65 años han tenido una caries y casi el 20% tiene una caries sin tratar. De hecho, la caries dental es la enfermedad crónica Núm. 1 para este grupo de edad.

Aquí las buenas noticias: hay mucho que puede hacer para ayudar a prevenir la caries. Para empezar, continúe cepillándose los dientes al menos dos vecesl al día y usando el hilo dental a diario. El obtener la cantidad correcta de flúor también es importante. Tome agua con flúor – normalmente obtenida directo del grifo – y cepíllese con una pasta dental con flúor. Lleve el cuidado preventivo a otro nivel y pregúntele a su dentista acerca de los enjuagues y los geles con flúor. Los estudios muestran que aquellos que usan flúor regularmente tienen menos caries.

2. Detecte a tiempo cualquier problema de salud.

Cerca de 1 de cada 4 adultos de 65 años o más no ha consultado un dentista en cinco años, según la Encuesta nacional examinadora de salud y nutrición. Es importante recordar que las consultas dentales regulares son una prioridad, incluso si usa dentadura postiza. Durante una visita de rutina su dentista también podría identificar señales de más de 120 enfermedades sistémicas, que incluyen cáncer en la boca, enfermedades del corazón y la diabetes – ¡con tan solo examinar su boca! Recuerde que muchos planes dentales cubren el cuidado preventivo y diagnóstico en un 100%.

3. Mantenga el sistema de defensa de su boca fortalecido.

A medida que envejece, es más probable que experimente síntomas de boca reseca. Esto quiere decir, menos saliva, la cual es una de las armas principales de su cuerpo para defenderse de las enfermedades de las encías y la caries dental porque enjuaga el ácido y las partículas de comida. La boca reseca puede ser un efecto secundario de ciertos medicamentos o puede ser el resultado de otros estados clínicos, como la diabetes.

De acuerdo a la Asociación dental estadounidense, cerca del 30% de las personas mayores de 65 años y 40% de las personas mayores de 80 años padecen de una boca reseca. El tomar agua a lo largo del día es un gran comienzo, pero también debe limitar el consumo de alcohol y bebidas que tengan mucho azúcar y cafeína.